Haití sufrió un devastador terremoto que dejó más de 1.200 muertos.
Varios países de América Latina se preparan para enviar ayuda humanitaria a Haití después de que un terremoto de magnitud 7,2 azotara la nación caribeña, el sábado por la mañana.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, dijo en una publicación en Twitter –el sábado– que contactó con las autoridades haitianas y que actualmente se están preparando para enviar ayuda humanitaria que “sin duda necesitan con desesperación y urgencia”.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo en un post en Twitter –el sábado– que ordenó a la Coordinación Nacional de Protección Civil y otras secretarías, como Relaciones Exteriores, Marina y Defensa que preparen ayuda “de inmediato”
Por otro lado la depresión tropical Grace se acerca a la costa sur de la República Dominicana esta mañana y lleva consigo la amenaza de inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra en la isla de La Española.
La trayectoria de Grace se ha desplazado más al sur y actualmente está programada para impactar directamente el área donde ocurrió el terremoto de magnitud 7,2 el sábado en Haití.
Grace lleva vientos máximos sostenidos de 55 kmh con ráfagas más altas. Las condiciones de tormenta tropical son posibles en la República Dominicana hoy, y en Haití hoy hasta esta noche.
Se esperan precipitaciones totales de 12 a 25 centímetros con cantidades aisladas de hasta 38 centímetros en el sur de La Española hasta el martes.
Grace podría seguir luego hacia el oeste, alejándose de Haití el martes por la mañana, de acuerdo con los pronósticos.
“Estoy preocupado por la próxima tormenta, ya que puede complicarnos la situación”, dijo Jerry Chandler, director de la agencia de protección civil de Haití.
Este terremoto es solo el último desafío para Haití, que todavía está lidiando con las consecuencias del ocurrido en 2010. El asesinato del presidente Jovenel Moïse el mes pasado, que aún no se ha resuelto ni explicado debidamente, ha sumado más inestabilidad a un país en crisis.
“Nos preocupa que este terremoto sea solo una crisis más a la que ya está enfrentando el país, incluido el estancamiento político cada vez mayor después del asesinato del presidente, el covid-19 y la inseguridad alimentaria”, dijo en un comunicado Jean-Wickens Merone, portavoz de World Visión Haití.
“Estamos empezando a recibir ayuda de las ONG y del gobierno, pero está lejos de ser suficiente”, dijo Arcelius.
El hospital tiene actualmente 500 víctimas del terremoto, muchas con pies y extremidades rotas, así como con heridas en la cabeza.
El gobierno haitiano declaró el estado de emergencia luego de que un terremoto de magnitud 7,2 sacudiera el país el sábado, dejando al menos 1.297 personas muertas y más de 5.700 heridas, según la agencia de protección civil del país.
De las 1.297 muertes, 1.054 están en la región administrativa del sur, 119 en Grand’Anse, 122 en Nippes y dos en la región noroeste, informó el servicio de protección civil el domingo.
El sismo destruyó 13.694 viviendas y dañó otras 13.785, dijeron funcionarios de la agencia. La destrucción también ha llevado a los hospitales al borde y ha bloqueado las carreteras que transportarían suministros vitales.
“Cuando se trata de necesidades médicas, esta es nuestra mayor urgencia. Hemos comenzado a enviar medicamentos y personal médico a las instalaciones afectadas”, dijo el primer ministro Ariel Henry. “Para las personas que necesitan atención especial urgente, hemos evacuado a un cierto número de ellos y evacuaremos a algunos más hoy y mañana”.
El estado de emergencia está en vigor para el Departamento Oeste, Departamento Sur, Nippes y Grand’Anse.
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