El individuo de la imagen es Ahmadreza Dyalali, un ciudadano sueco de origen iraní al que el régimen de la República Islámica condenó a muerte el pasado mes de octubre por “colaborar con un Gobierno hostil”.
Dyalali, investigador médico, denunció en una carta que escribió en fecha no determinada en el tétrico penal de Evin que, de hecho, lo que sucedió es que se negó a espiar para el régimen de los ayatolás, tal como le instó a hacer el Ministerio de Inteligencia iraní, que fue quien finalmente ordenó su detención.
La familia de Dyalali, residente en Suecia, denuncia que al científico se le está denegando la asistencia médica que precisa, lo que explica su dramática transformación física.
Según su esposa, la foto del Dyalali demacrado fue tomada a mediados de abril.
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Fuente: El Medio
