Matt Hudson era drogadicto y ateo . Después de que le diagnosticaran una enfermedad autoinmune y enfrentara el miedo a la muerte, se entregó a Jesús y fue sanado.
Matt creció en un hogar cristiano en los Estados Unidos, pero se alejó de Dios en la escuela secundaria. Entonces empezó a llenar el vacío con bebidas y drogas.
En su juventud, a pesar de su creciente adicción, logró trabajar en el negocio familiar.
Sin embargo, después de un tiempo, las drogas se apoderaron de él y su hermano lo despidió.
“Estaba muy avergonzado y quería recuperar mi trabajo y esas cosas. Y estaba realmente enojado con mi hermano”, dijo Matt a CBN News.
A pesar de los problemas que Matt causó, la familia nunca dejó de orar por él, especialmente su hermana Sarah.
“Seguí creyendo que Dios cambiaría su vida. Y dije: ‘No podemos renunciar a él’”, dijo Sarah.
Reconociendo al Señor
Algún tiempo después, Matt se mudó a una habitación en la propiedad de sus padres. Pero las drogas seguían siendo un desafío para él.
“Estaba muy avergonzado y tenía miedo de adónde iría si moría, pero aun así no podía parar”, dijo.
En diciembre de 2017, Matt pasó tiempo con su familia durante el período navideño. Después de eso, empezó a darse cuenta de cómo había desperdiciado su vida.
“Me daban ataques de pánico masivos y decía: ‘Dios mío, ¿qué voy a hacer con mi vida? ¿Cómo voy a parar?’”, dijo Matt.
“Entonces caí de rodillas y clamé a Dios: Señor, te entrego mi vida. Lo siento mucho. Me equivoqué”, añadió.
Incluso después de eso, Matt no pudo dejar de consumir drogas. Después de dos semanas, empezó a sentirse mal. Aparecieron manchas en sus brazos y piernas y tenía problemas para respirar.
Matt fue llevado a la sala de emergencias y admitido en el hospital, donde continuó empeorando. Los médicos no pudieron determinar qué tenía.
Cuando el padre de Matt fue a visitarlo, los médicos le dijeron que se estaba muriendo. “Pude ver el miedo en su rostro. Simplemente me abrazó y lloré con él. Le dije: ‘Papá, lo siento’. Lamento haber arruinado esto’”, recordó.
Complicaciones
Matt desarrolló neumonía y los médicos decidieron ponerlo en coma. Mientras la familia seguía orando, Sara se aferró a una palabra que había recibido de Dios.
“Dios lo resucitará y él contará su testimonio y compartirá la Palabra de Dios con todos”, dijo.
En enero de 2018, los médicos pudieron llegar a un diagnóstico e informaron que Matt tenía dermatomiositis, una enfermedad autoinmune.
Según CBN News, aunque la enfermedad no tiene cura, puede tratarse con transfusiones de sangre y medicamentos.
Después de dos meses en el hospital, Matt fue dado de alta y se mudó con la familia de su hermano. Desde entonces dejó las drogas, fue perdonado por su familia y comenzó a descubrir el amor de Dios por él.
“Pasé seis meses llorando lágrimas curativas. Porque acabo de darme cuenta de cuánto me amaba mi padre. Me di cuenta de que incluso con todas mis adicciones y todo este tiempo, Él estuvo conmigo todo el tiempo”, dijo Matt.
Restauracion
En junio de 2022, Dios respondió a sus oraciones. Matt fue al médico para hacerse pruebas y tener una cita de rutina.
“El médico dijo: ‘Todas sus pruebas son normales’. Le pregunté: ‘Doctor, ¿es esto un milagro ?’. Y él dijo: ‘Eso nunca sucedió’”, dijo.
“El médico no lo podía creer. Me quitó las infusiones y empezó a cancelar la medicación. Tenía razón, ya no era como antes, de hecho estoy mejor”, añadió.
Hoy, Matt está sano y libre de drogas. Asiste a la Escuela Bíblica de la Iglesia Bethel en Redding, California.
Como había profetizado su hermana, se está preparando para servir en el ministerio: “Dios hace estas cosas, en mi vida, fue increíble”, dijo.
Y concluyó diciendo: “Tengo esperanza. Sé lo que es que Dios cambie tu vida”.
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