Trabajando para asegurar el alto el fuego entre Israel y Hamas, Blinken llega a Egipto

Antes de salir de Israel, el secretario de Estado de Estados Unidos invita al presidente Rivlin a reunirse con Biden en las próximas semanas; en El Cairo, enviado de Estados Unidos para reunirse con líder egipcio y jefe de espías

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, saluda al salir de Israel desde el aeropuerto Ben Gurion luego de su visita a Israel y los territorios palestinos, visto en su salida el 26 de mayo de 2021. (Alex Brandon / AFP)

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó a Egipto el miércoles en la siguiente etapa de una misión diplomática destinada a reforzar un alto el fuego que puso fin a un enfrentamiento militar de 11 días entre Israel y Hamas.

Blinken concluyó extensas conversaciones con líderes israelíes y palestinos y tiene previsto viajar a Ammán, Jordania, el miércoles por la noche para reunirse con el rey jordano y otros funcionarios.

Ha prometido «reunir apoyo internacional» para reconstruir la destrucción en Gaza, mientras que también prometió asegurarse de que ninguna de las ayudas destinadas al territorio llegue a Hamas.

Antes de su partida, Blinken extendió la invitación del presidente estadounidense Joe Biden al presidente Reuven Rivlin para que visite Estados Unidos en las próximas semanas. Rivlin aceptó, según un comunicado de su oficina.

El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Anthony Blinken, a la izquierda, y el presidente Reuven Rivlin, a la derecha, durante su reunión en la Casa del Presidente el 26 de mayo de 2021 (Mark Neyman (GPO)

Blinken describió a Egipto y Jordania como actores centrales en el intento de traer calma a la región. Ambos países son aliados clave de Estados Unidos que tienen acuerdos de paz con Israel y con frecuencia sirven como mediadores entre Israel y los palestinos.

«Egipto jugó un papel fundamental para ayudar a negociar el alto el fuego y Jordania ha sido durante mucho tiempo una voz a favor de la paz y la estabilidad en la región», dijo a los periodistas el martes por la noche.

En Egipto, que limita con Israel y Gaza, Blinken tenía programado mantener conversaciones con el presidente Abdel Fattah el-Sissi, el ministro de Relaciones Exteriores Sameh Shukry y el jefe de espías del país, Abbas Kamel. Biden habló con Sissi durante el conflicto para ayudar a negociar el alto el fuego.

Blinken se ha fijado metas modestas para el viaje, su primera visita oficial a Oriente Medio como secretario de Estado. Durante las conversaciones con los líderes israelíes y palestinos el martes, dejó en claro que Estados Unidos no tiene planes inmediatos para entablar conversaciones de paz entre las partes, tal vez porque los esfuerzos de las administraciones anteriores han fracasado.

En cambio, expresó su esperanza de crear un «mejor ambiente» que podría conducir a conversaciones de paz.

Eso podría comenzar con el esfuerzo de reconstrucción de Gaza.

El último enfrentamiento militar con Hamas, que terminó con un alto el fuego el viernes temprano, dejó más de 240 muertos en Gaza y 13 muertos en Israel. Israel afirma que la gran mayoría de los muertos en la Franja eran combatientes. Los combates también causaron una gran destrucción en el empobrecido territorio costero. Las estimaciones preliminares han cifrado el daño en cientos de millones de dólares.

Uno de los objetivos de Estados Unidos es asegurar que cualquier ayuda se mantenga fuera de las manos de Hamas, que se opone al derecho de Israel a existir y que Israel y Estados Unidos consideran un grupo terrorista.

En cambio, está tratando de reforzar al gobierno rival del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, cuyas fuerzas fueron expulsadas de Gaza por Hamas en 2007. La Autoridad Palestina de Abbas ahora administra áreas autónomas en Cisjordania controlada por Israel. Abbas ha sido en gran parte marginado por los acontecimientos recientes, es profundamente impopular en casa y tiene poca influencia en Gaza.

Abbas espera establecer un estado independiente en toda Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este, áreas capturadas por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967.

En un gesto hacia los palestinos, Blinken anunció el martes planes para reabrir el consulado de Estados Unidos en Jerusalén, una oficina que históricamente se encargaba del acercamiento diplomático a los palestinos.

El ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, degradó el consulado y colocó sus operaciones bajo su embajador en Israel cuando trasladó la embajada estadounidense a Jerusalén desde Tel Aviv en 2018. La medida de Jerusalén enfureció a los palestinos, que reclaman Jerusalén Oriental como su capital y los llevó a separar la mayoría de los lazos con Estados Unidos.

Blinken también anunció casi $ 40 millones en ayuda adicional para los palestinos. En total, la administración Biden ha prometido unos 360 millones de dólares a los palestinos, restaurando la ayuda que la administración Trump había cortado.

El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, a la derecha, se reúne con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la ciudad cisjordana de Ramallah, el 25 de mayo de 2021 (Majdi Mohammed / AP).

En una reunión con Abbas en la ciudad cisjordana de Ramallah, Blinken dejó en claro el martes que Biden buscará un enfoque más imparcial que Trump, quien se alineó abrumadoramente con Israel en sus tratos con los palestinos.

Blinken dijo que Estados Unidos estaba comprometido a «reconstruir la relación con la Autoridad Palestina y el pueblo palestino, una relación basada en el respeto mutuo y también en la convicción compartida de que tanto los palestinos como los israelíes merecen medidas iguales de seguridad, libertad, oportunidades y dignidad».

La tregua que puso fin a la violencia en Gaza se ha mantenido hasta ahora, pero no abordó ninguno de los problemas más profundos que plagan el conflicto israelí-palestino, algo que Blinken reconoció después de reunirse el martes con el primer ministro Benjamin Netanyahu.

“Sabemos que para evitar un retorno a la violencia, tenemos que utilizar el espacio creado para abordar un conjunto más amplio de problemas y desafíos subyacentes”, dijo.

Esos desafíos incluyen un liderazgo israelí agresivo que parece no estar dispuesto a hacer concesiones importantes, divisiones palestinas, años de desconfianza y tensiones profundamente arraigadas en torno a Jerusalén y sus lugares sagrados.

El conflicto militar se desencadenó cuando Hamas lanzó cohetes contra Jerusalén en medio de semanas de enfrentamientos en Jerusalén entre la policía israelí y manifestantes palestinos en y alrededor de la Mezquita Al-Aqsa, construida en el recinto del Monte del Templo, que es venerado por judíos y musulmanes y ha visto varios brotes de violencia israelí-palestina a lo largo de los años. Las protestas estaban dirigidas contra la vigilancia de la zona por parte de Israel durante el mes sagrado musulmán del Ramadán y la amenaza de desalojo de decenas de familias palestinas en el barrio de Sheikh Jarrah de Jerusalén oriental.

La tregua sigue siendo tenue ya que las tensiones aún son altas en Jerusalén y el destino de las familias palestinas aún no está resuelto.

El primer ministro Benjamin Netanyahu, a la derecha, se reúne con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en su oficina en Jerusalén, el 25 de mayo de 2021 (Haim Zach / GPO).

En sus comentarios después de su reunión con Blinken, Netanyahu apenas mencionó a los palestinos, advirtiendo de una respuesta «muy poderosa» si Hamas rompe el alto el fuego.

Netanyahu habló de «construir crecimiento económico» en Cisjordania, pero dijo que no habrá paz hasta que los palestinos reconozcan a Israel como un «estado judío». Los palestinos se han opuesto durante mucho tiempo a esa demanda, diciendo que socava los derechos de la propia minoría palestina de Israel.

Blinken afirmó repetidamente lo que dijo que era el derecho de Israel a defenderse y dijo que Estados Unidos ayudaría a Israel a reabastecer su sistema de interceptación de cohetes Cúpula de Hierro.

Pero también pidió a los líderes de todas las partes que tracen un «mejor rumbo» con la esperanza de sentar las bases para las conversaciones de paz destinadas a establecer un estado palestino independiente junto a Israel. La administración Biden, como la mayoría de la comunidad internacional, cree que una solución de dos estados es la única forma de resolver el conflicto.

Blinken expresó su esperanza de que un enfoque internacional exitoso en Gaza sería un primer paso importante y podría «socavar» el control de Hamas en el poder.

«Hamas prospera, desafortunadamente, en la desesperación, en la miseria, en la falta de oportunidades», dijo. Si hay una cooperación exitosa en Gaza entre Israel, la Autoridad Palestina y la comunidad internacional, “entonces el punto de apoyo de Hamas en Gaza se resbalará. Y lo sabemos. Y creo que Hamas lo sabe «.

Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael

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