Uganda se ha convertido en el país que tiene cifras altas en secuestros de niños para rituales de sacrificios humanos hechos por los mismos ciudadanos, lo que al parecer es una superstición en África es la cruda realidad de cientos de niños que mueren a manos de hechiceros que los asesinan para “obtener riquezas”.
El pastor Peter Sewakiryanga trabaja de la mano con políticos de su país para acabar con tal brutalidad y poder dar con el paradero del brujo que comete dichos sacrificios, él junto a su organización Child Care Ministries Kyampisi se ha comprometido con acabar estos tipos de rituales para “tener protección y bienes materiales”.
Un mujer de la localidad cuenta como su hijo desapareció un día de su jardín mientras jugaba para luego saber que había sido asesinado por este hechicero.
“Yo tenia grandes esperanzas y sueños para Clive. Fue a las 10am cuando nos dimos cuenta de que no estaba en ningún lugar de nuestra casa” cuenta Rachel Kaseggu.
Su hijo fue víctima de sacrificios en “beneficio” de uno de sus vecinos que es multimillonario y lo secuestro para mutilarlo y así tener “suerte” en su nuevo negocio, el precio del niño oscila en los 1.400 $, “Parecía muy extraño que alguien a causa de una superstición, podría sacrificar a un niño de tres años” dice el detective Emmanuel Mafundo, encargadon de las investigaciones de la muerte de Clive Kaseggu, el niño de 3 años desaparecido de casa de sus padres.
Pero así como hay lamentables muertes, hay otros que por la gracia de nuestro Padre bueno han podido salir ilesos de tan horrorizantes actos de brujería, 3 niños pudieron sobrevivir a la muerte con solo cicatrices emocionales y algunas físicas de todo lo que les tocó vivir.
Kanani Nankunda y su hermana son testigos de ello, pues fueron atacadas por el hechicero mientras jugaban haciéndole un corte detrás del cuello para poder drenar su sangre, “Me desmayé y cuando me desperté, me encontré con mi hermana muerta y sin cabeza. Trate de llamar a mis padres pero mi voz no era lo suficientemente fuerte para poder ser escuchada” contó Nankunda.
Éste fue víctima también del brujo, pues hubo que construirle sus genitales con piel de injerto de su antebrazo; así como él también hay otros y entre todos buscan animarse y superar los horrores vividos, “Dios me ayudó y nos está ayudando de maneras diferentes”.
La madre del niño de 3 años dice que la vida sin su hijo no será la misma, pero que fue su fe en Jesús que se ha podido levantar luego de esta gran pérdida, “Debido a mi fe en Jesús, creo en las segundas oportunidades, y yo les daría una segunda oportunidad, porque no hay nada que pueda hacer para traer a mi Clive de vuelta. Mi mensaje para ellos es: confiesen sus pecados y conviértanse al Señor, Él perdonará sus pecados”, concluye.
Fuente: Biblia Todo
