El indio George P. Chacko se mudó con su familia a los Estados Unidos cuando era un adolescente en 1980. Su abuelo había servido como evangelista de las Asambleas de Dios en India y su tío se convirtió en pastor, Chacko eligió un camino diferente cuando Llegó a su edad adulta en Nueva York: invirtiendo en su carrera financiera.
Durante 14 años, Chacko trabajó como especialista en operaciones en Merrill Lynch, un banco de inversión estadounidense. Pasó todos estos años trabajando en Wall Street, buscando una vida más próspera.
“Sabía que tenía un llamado ministerial, pero no quería ser pastor”, dice Chacko, de 56 años, a AG News. Estaba contento con simplemente donar fondos a las misiones y ayudar al grupo de jóvenes de la iglesia.
Su vida cambió drásticamente una noche de noviembre de 1999, cuando cuatro hombres armados se acercaron a él después de retirar dinero de un banco. El cuarteto había seguido a Chacko desde un tren hasta el banco. Cuando regresaba a casa, en la oscuridad, uno de los hombres lo golpeó en la cabeza.
El otro le disparó a Chacko dos veces en el pecho, pero no salió ninguna bala de la pistola.
Aunque levemente herido, Chacko no sufrió daños físicos. Sin embargo, los ladrones se escaparon con $ 3,500 en efectivo y algunos giros postales que llevaba consigo.
La policía nunca capturó a los bandidos ni recuperó el valor, pero ese hecho cambió el destino de Chacko. “Por la gracia de Dios, sobreviví”, dice. “Escuché la voz de Dios: ‘¿Me vas a servir?’”
A los 36 años, Chacko renunció a su puesto en Merrill Lynch y comenzó a dedicarse solo al ministerio.
Después de completar sus estudios de teología en Global University, Chacko pasó a dirigir la Asamblea de Dios de Cristo en Queens, Nueva York. La iglesia se trasladó a un edificio en Floral Park y luego a una sinagoga judía en Franklin Square, donde se encuentra actualmente.
Aproximadamente el 60% de los fieles nacieron en Estados Unidos, mientras que el resto procedía de la India. AD Cristo abrió 31 congregaciones afiliadas, así como un centro de capacitación en India. Sirve a Dios junto a su esposa, Anu, y sus tres hijas: Christine y su esposo, Blessen Samuel; Justine y su esposo, Shalom John y Hannah.
“Tiene algunos dones espirituales importantes, una unción en su vida y ama a la gente”, dice Duane Durst, amigo de Chacko durante 26 años. “Fue necesario un claro llamado de Dios para dejar una profesión lucrativa, pero estoy agradecido de que haya aceptado un llamado mayor”.
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