Durante su notoria participación en la película “Pablo: Apóstol de Cristo”, el actor James Faulkner, a quien también se le conoce por participar en Games of Thrones, ha sorprendido a todo su público por revelar cierta información sobre su experiencia “espiritual” durante el rodaje del largometraje.
James junto a Jim Caviezel, quien encarnó a Jesús en la “Pasión de Cristo”, protagonizaron la cinta en 2018 obteniendo un éxito rotundo en taquilla durante su primer fin de semana de exhibición, “Es muy importante para mucha gente, conozco a personas que han estudiado allí. Se llevaron a sus maestros a Pablo y me complace mucho que los historiadores católicos aprobaran mi versión”, dijo Faulkner sobre la cinta.
Faulkner quien ha trabajo en innumerables proyectos seculares a lo largo de su carrera como actor, sintió algo diferente sobre ser parte de una producción cristiana, “Estuve en Los Ángeles el año pasado para los Premios SAG por ‘Juego de tronos’, que es un campo de entretenimiento bastante diferente. Y tan maravilloso y grande como es, es un espectáculo muy violento y hay mucho sexo y mucha desnudez, pero al menos es un espectáculo de fantasía. Pero creo que las películas basadas en la fe, las películas familiares, las películas que celebran nuestra mejor naturaleza son importantes”, dijo en la alfombra roja de los premios MovieGuide.
Al principio del llamado para protagonizar la historia de Pablo no le convencía mucho, pero al leer el guión sabía que tenía que ser parte de ello, “Me llevó en un viaje. Mi esposa estaba sorprendida por la diferencia en mí. Ella dijo: ‘Si solo pudieras ser así todo el tiempo. Es fantástico, estás lleno de un espíritu completamente diferente”, dijo Faulkner en referencia a estar lleno del Espíritu Santo lo que fortaleció su fe, que no era tan fuerte como ahora.
“Jim (Caviezel) es un hombre devoto, mientras que yo soy luz anglicana. Pero tengo algunas preguntas como resultado de interpretar a Pablo y veo el mundo de manera diferente y a los demás seres humanos de manera diferente”, confesó de Jim, quien instó a Faulkner a dejar su personalidad de lado para encarnar al Apóstol mientras compartieron en el set de grabación.
