Al salir de Caracal, el teniente coronel Erez Shabtay elogia el desempeño de las unidades mixtas sobre las del mismo sexo, dice que sus tropas redujeron el contrabando en la frontera egipcia en un 80%.
FRONTERA ISRAEL-EGIPTO – En dos años, cree el teniente coronel Erez Shabtay, las Fuerzas de Defensa de Israel, por primera vez en la historia, elevarán a una oficial a la jefatura de un batallón de infantería.
“Hay muchas posibilidades de que en otros dos años veamos a la primera mujer comandante de batallón de infantería. No puedo decirte el nombre, pero sucederá», dijo Shabtay a The Times of Israel recientemente mientras conducía su jeep cerca de la frontera con Egipto, donde sirve su batallón.
Shabtay no pudo decir con certeza quién será la mujer, aunque tenía «algunos nombres de personas que creo que llegarán allí». Pero estaba seguro de a quién reemplazará: el teniente coronel Guy Basson, quien reemplazó a Shabtay el miércoles como comandante de Caracal, el primer batallón de infantería de género mixto de las FDI.
Ni Shabtay ni Basson comenzaron sus carreras en batallones con mujeres. Shabtay sirvió en la Brigada de Infantería Kfir de hombres y en la Unidad Duvdevan antiterrorista antes de postularse para convertirse en comandante del Batallón Caracal, que hoy es uno de los cuatro batallones de infantería mixtos.
“No sabía nada de Caracal de antemano. Lo aprendí por primera vez en este puesto ”, dijo Shabtay.
“Lo que he visto en este batallón me abrió a un mundo totalmente diferente. Tenemos mujeres combatientes y oficiales que son increíbles, en términos de su capacidad cognitiva, su creatividad, su valentía y su coraje ”, dijo.
El comandante saliente del Batallón Caracal, el teniente coronel Erez Shabtay, se dirige a los soldados en una fotografía sin fecha. (Fuerzas de Defensa de Israel)
Basson está más familiarizado con las unidades mixtas, ya que acaba de servir como jefe de operaciones de la División del Valle centrada en la frontera jordana, que comanda otros dos batallones mixtos.
En sus últimos meses al mando de Caracal, Shabtay supervisó dos asuntos importantes en la unidad: la represión del contrabando de drogas a lo largo de la frontera egipcia y la preparación para la llegada de operadoras de tanques.
Esto último ha coincidido con un debate sobre si las mujeres pueden servir en unidades de combate. Pero Shabtay deja de lado las espinosas cuestiones de género y capacidad.
«Hay un bar … Si pasa, puede ser un soldado de combate. Si no lo hace, no puede «, dijo. “Y yo no puse el listón; las FDI lo hicieron «.
Nadie hace esto mejor
Caracal se formó en 2000 como una pequeña compañía de tropas de combate masculinas y femeninas. Cuatro años después, se convirtió en un batallón, con cientos de efectivos.
Durante una década, siguió siendo el único batallón de infantería de género mixto en las FDI, hasta que se formó el Batallón Leones de Jordania en 2014, seguido poco después por el Batallón Bardelas, o Cheetah, en 2015, y el Batallón Leones del Valle en 2017, lo que elevó el número de mujeres combatientes de unos pocos cientos en 2012 a varios miles en la actualidad.
Las unidades defienden principalmente las fronteras de Israel con Jordania y Egipto como parte del Cuerpo de Defensa Fronteriza de las FDI.
El dramático aumento en el número de mujeres soldados de combate ha estado acompañado por un debate en curso, y ocasionalmente casos judiciales, sobre la integración de género en el ejército.
La semana pasada, el ministro de Defensa, Benny Gantz, dijo que se oponía a la integración total de género. Había sido desafiado en una reunión de gabinete por la ministra de Transporte, Merav Michaeli, quien había pedido a los militares que abrieran todas las unidades a todos los géneros, determinando quién puede servir en cada lugar únicamente por su capacidad.
«No habrá una compañía de mujeres soldados en Golani», dijo, según la emisora Kan, refiriéndose a la brigada de infantería. Sin embargo, sostuvo que alentó a los militares a ofrecer más roles a las mujeres.
«No puedo hablar sobre Golani», dijo Shabtay cuando se le preguntó si comparte la opinión de Gantz. “Puedo hablar de mi batallón. No tengo ninguna duda sobre la capacidad de las mujeres para ser combatientes. Si quieres, te llevaré a ver un ejercicio de combate a fuego real con explosiones y tanques. Mujeres soldados arrastrándose, atacando, disparando, dando órdenes. Y también hemos sido probados bajo fuego. Nuestros soldados, bajo fuego, hicieron su trabajo de manera asombrosa. No les dejamos hablar de nada: de la aptitud física, de la puntería. Quien no pueda cortarlo, es como un hombre «.
Señaló que su batallón ocupó recientemente el tercer lugar en una evaluación de aptitud física de las FDI, y que una de sus soldados ocupó el primer lugar entre las tropas femeninas.
Shabtay también enfatizó que sus mujeres soldados debían estar motivadas para ingresar al Batallón Caracal. Para ingresar a la unidad de combate, que está compuesta por un 70% de mujeres y un 30% de hombres, las mujeres soldados tenían que aceptar servir ocho meses adicionales en las FDI en la escala salarial de las tropas de reclutamiento, no con los salarios más altos que otros soldados que firman por tiempo adicional reciben.
“Cuando tienes buena gente, puedes hacer cualquier cosa”, dijo.
Uno de los argumentos más comunes en contra de la integración de género en el ejército es que, en promedio, las mujeres son físicamente más débiles que los hombres. Para adaptarse a esas diferencias, las FDI han reducido algunos estándares de aptitud para las tropas de combate femeninas. En un caso a menudo planteado, los militares permitieron que las mujeres soldados usaran un taburete bajo para ayudarlas a trepar por una pared, algo que sus homólogos masculinos no pueden usar.
Shabtay reconoció esos problemas, pero los rechazó por ser, en última instancia, insignificantes.
“Sí, en general, si se toma a los hombres y se toma a las mujeres, en masa, los hombres son más fuertes. Corren más rápido, levantan pesos más pesados, etc. Pero debe comprender que estamos preparando a las personas para una misión. Somos un batallón de defensa fronteriza. Y les digo con la conciencia tranquila que no hay ningún batallón en las brigadas de infantería pesada que pueda hacer el trabajo de defender la frontera mejor que nosotros. Eso es lo más importante ”, dijo.
De hecho, un polémico estudio de 2015 realizado por el Cuerpo de Marines de EE.UU. sobre la eficacia de las unidades mixtas descubrió que las unidades exclusivamente masculinas se adaptaban inequívocamente mejor a las tareas físicas, siendo más rápidas, más precisas y menos propensas a lesionarse. Pero el mismo estudio también encontró que los equipos mixtos sobresalían en la toma de decisiones complejas y tenían menos problemas disciplinarios.
“Un batallón mixto como el nuestro tiene más beneficios que los que tendría un batallón homogéneo”, dijo Shabtay. “La heterogeneidad y las diferencias solo nos hacen más fuertes”.
A diferencia de Golani y las otras brigadas de infantería pesada, no se espera que Caracal opere profundamente detrás de las líneas enemigas, ni está entrenado para ello. Más bien, está destinado a patrullar y asegurar la frontera.
“Necesito que mis soldados, hombres y mujeres, disparen bien, alcancen sus objetivos, usen las ametralladoras correctamente, respondan al fuego entrante de la mejor manera, y necesitan saber cómo operar en un ambiente desértico”, dijo Shabtay.
“En términos de defensa fronteriza, somos expertos. Esa es nuestra experiencia. No necesito que mi batallón se ocupe de llevar paquetes pesados durante 40 kilómetros (25 millas) como en Golani. Ese no es el nivel de aptitud que necesitamos. No me interesa ”, dijo.
La «pacífica» frontera egipcia
Lo que le interesa es el contrabando. Los últimos dos años han sido testigos de cientos de intentos de contrabando a lo largo de la frontera egipcia, trayendo miles de millones de shekels en drogas y contrabando al país cada año, según estimaciones oficiales. En algunos casos, estos traficantes de drogas pueden volverse violentos, y los contrabandistas abren fuego contra los soldados israelíes o la policía que intenta detenerlos.
“Tenemos una guerra aquí con un cartel criminal”, según Shabtay.
En general, los intentos de contrabando se ven así: un grupo de hombres conduce hasta la cerca de acero inoxidable de 10 pies de altura desde el lado egipcio de la frontera. Suben escaleras, suben a lo más alto y arrojan sacos de drogas, a veces decenas de kilogramos, a los contrabandistas que esperan al otro lado. Los hombres del lado israelí recogen rápidamente los paquetes, los cargan en camiones y se van.
«Todo termina en un minuto y medio», dijo Shabtay.
A pesar de la velocidad de estas corridas de drogas, el comandante de Caracal dijo que si bien no siempre llegan a tiempo para detener los intentos de contrabando, es extremadamente raro que sus tropas los pierdan por completo.
Según las evaluaciones de las FDI, los contrabandistas de beduinos realizaron alrededor de 300 intentos en 2020 y aproximadamente el mismo número en 2019. El comienzo de 2021 estaba en camino de igualar esos años, con aproximadamente 100 intentos de contrabando registrados en abril.
Desde entonces, el Batallón Caracal y varias otras unidades militares y policiales han intensificado significativamente sus esfuerzos para detener los esfuerzos de contrabando, y han dado sus frutos.
En los últimos tres meses solo se han visto unos 20 intentos de contrabando, una reducción del 80 por ciento, una cifra que Shabtay calificó de «fenomenal».
De estos, la mayoría han sido impedidos por tropas en la frontera. Según las cifras del ejército, las tropas en la frontera han evitado aproximadamente la misma cantidad de intentos de contrabando en la primera mitad de 2021 (50) que en todo 2020. En todo 2019, las FDI impidieron solo 26 tráfico de drogas.
“Cuando uno tiene éxitos operativos y se apodera de los autos, se apodera de las drogas y captura a la gente, esto disminuye su capacidad para actuar libremente. Esto lo hace muy difícil y oneroso para ellos. Esa es la razón principal de la disminución «, dijo Shabtay.
Aproximadamente una sexta parte de los intentos han sido violentos, y los contrabandistas abrieron fuego contra los soldados que intentaban detenerlos.
«En los últimos dos años, hemos tenido una serie de tiroteos en los que hemos participado, en los que al final pudimos golpear [a los tiradores] y evitar el intento de contrabando», dijo Shabtay.
En abril, se produjeron dos de esos encuentros, en los que los soldados dispararon contra hombres armados muertos que abrieron fuego contra ellos en ambos casos.
Preparándose para el Estado Islámico
Si bien el Batallón Caracal se ocupa del contrabando en el día a día, no es la principal preocupación de la unidad.
Aunque Israel y Egipto ya no están en guerra, la región fronteriza todavía presenta grandes desafíos para los militares, en gran parte debido a la presencia de terroristas con base en el Sinaí.
«Está la provincia del Sinaí [del grupo terrorista Estado Islámico] y debemos estar preparados, de la mejor manera posible, para un ataque por parte de ella si así lo decide», dijo Shabtay.
La llamada provincia del Sinaí es una rama relativamente pequeña del Estado Islámico, pero que ha representado una amenaza significativa para el ejército egipcio desde 2014, llevando a cabo importantes ataques contra soldados y civiles egipcios en ese tiempo y disparando una serie de cohetes hacia Israel en al menos dos ocasiones.
Los ataques también son anteriores al Estado Islámico. En agosto de 2011, terroristas en el Sinaí llevaron a cabo una serie de ataques transfronterizos, matando a seis civiles israelíes, un oficial de policía y un soldado de las FDI en el lapso de unas pocas semanas.
Un año después, los terroristas se infiltraron en Israel para atacar a un grupo de soldados que brindaban ayuda a los migrantes africanos atrapados en la valla fronteriza. Tropas de Caracal, tanto hombres como mujeres, respondieron y mataron a los atacantes, la primera vez que el batallón entró en combate. Una mujer oficial recibió una medalla por matar a un terrorista. Según los informes, una segunda mujer soldado, que se escondió entre la maleza en lugar de enfrentarse a los terroristas, fue sancionada.
“Cuando un soldado sale a una misión, eso es en lo que está pensando. Están pensando en un ataque a la frontera, un ataque a los soldados, un ataque a una comunidad en el área de Nitzana ”, dijo Shabtay, refiriéndose a una pequeña ciudad fronteriza israelí.
Tanques completamente femeninos
Aunque Shabtay elogia la importancia de su unidad de género mixto, que reúne las capacidades de hombres y mujeres, las tripulaciones de tanques que se unirán a Caracal en los próximos días estarán formadas solo por mujeres soldados.
“Hay comandantes superiores, comités, etc. Decidieron cómo iría. Fue su decisión ”, dijo.
Las tripulaciones de tanques femeninos son parte de un nuevo programa piloto para evaluar la posibilidad de abrir ciertas unidades blindadas a las mujeres. Una prueba anterior en 2017-2018 se consideró inicialmente un éxito, pero luego se descubrió que no fue concluyente, ya que no evaluó completamente todos los aspectos de la operación de un tanque, según las FDI. Como tal, y luego de una petición al Tribunal Superior de Justicia de varias adolescentes que querían servir en tanques, el ejército anunció que estaba iniciando un nuevo juicio el año pasado.
Los participantes completaron su entrenamiento el mes pasado y ahora serán desplegados a lo largo de la frontera egipcia para probar su temple en el mundo real, dijo Shabtay.
Además de ser las primeras tripulaciones operativas de tanques exclusivamente femeninas, su llegada también convertirá a Caracal en el único batallón de infantería que tiene tanques directamente bajo su mando. En otras partes de las FDI, aunque las unidades blindadas a menudo trabajan con unidades de infantería, lo hacen en una jerarquía separada.
“Esto convierte al Batallón Caracal en el primer batallón de múltiples cuerpos de las FDI. Tengo capacidades de infantería, capacidades de recopilación de inteligencia y capacidades blindadas bajo mi mando, orgánicamente. Ningún otro comandante de batallón en las FDI es infantería y tiene tanques que son suyos ”, dijo Shabtay.
Vida familiar
El tiempo de Shabtay como comandante del Batallón Caracal no ha sido fácil para su familia, requiriendo una gran cantidad de tiempo en la base de la unidad cerca de la frontera con Egipto y lejos de su casa en la ciudad central de Modiin y su esposa y tres hijos, de 7 años. 6 y 3.
“Estos dos últimos años como comandante de batallón han sido un desafío para mi familia”, dijo, estimando que había pasado la mitad de sus fines de semana durante los últimos dos años en la base. “Un fin de semana, un fin de semana libre. Una vez en dos años estuve libre durante dos fines de semana seguidos «.
“El domingo es un duro adiós. Ponerlos a dormir el sábado por la noche, es difícil que los niños se duerman porque saben que me voy a ir por unos días y no me verán «, dijo.
Para su esposa, que se mudó a Israel desde los Estados Unidos después de la Segunda Guerra del Líbano de 2006, su tiempo como comandante de Caracal ha sido aún más difícil, sin familiares cercanos en el país que le echen una mano.
“Pero incluso cuando pagamos precios altos por ello, ella sabe la importancia de defender al Estado de Israel. Gran parte de esta posición solo fue posible gracias a ella ”, dijo Shabtay sobre su esposa.
En su próximo puesto, Shabtay estará al mando de la base de entrenamiento del Cuerpo de Defensa Fronteriza, conocida como Sayarim, en lo profundo del desierto de Arava.
El nuevo trabajo está aún más lejos de Modiin, pero la familia Shabtay ha decidido cambiar de rumbo: su esposa e hijos se mudan a la base aérea de Ovda, a solo unos minutos de Sayarim.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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Fuente: Unidos x Israel
