Hamás insiste en que las masacres fueron una respuesta a la ocupación y una “amenaza a la mezquita de Al-Aqsa”; sin embargo, los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica dicen que son “muy conscientes” de por qué Israel supuestamente asesinó a otro alto general en Damasco
El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán dijo el miércoles que el devastador ataque del grupo terrorista Hamás contra Israel fue una venganza por el asesinato en 2020 del jefe de la Fuerza Quds del IRGC, Qassem Soleimani, en un ataque con aviones no tripulados estadounidenses.
El portavoz del IRGC, Ramazan Sharif, vinculó las masacres del 7 de octubre con Soleimani en comentarios que hizo sobre el asesinato de otro alto oficial a principios de esta semana en un ataque aéreo que Irán atribuyó a Israel. El general Razi Mousavi, cercano a Soleimani, murió en un ataque a su casa en Damasco el lunes.
Mousavi era responsable de coordinar la alianza militar entre Irán y Siria e Israel creía que había estado muy involucrado en los esfuerzos de Teherán para suministrar armas a los representantes terroristas en el área, incluido el grupo terrorista Hezbola del Líbano.
Sharif dijo que el ataque de Hamás en octubre fue “una de las venganzas” por el asesinato de Soleimani.
También dijo que el IRGC es “muy consciente” de las razones por las que Israel mató a Mousavi en Damasco, pero afirmó que el asesinato no obstaculizaría su campaña “contra la entidad sionista”.
“Responderemos en consecuencia, directa o indirectamente a través del eje de resistencia”, amenazó.
El IRGC calificó además el asesinato de “acto de terror” y prometió que la respuesta “será decisiva en el momento y lugar adecuados”.
Sin embargo, Hamas rápidamente negó la afirmación iraní y reiteró que atacó a Israel por lo que describió como “los peligros que amenazan a la Mezquita de Al-Aqsa”, en referencia al sitio islámico clave en el Monte del Templo en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
En un comunicado, el grupo terrorista dijo que “todas las acciones de resistencia palestina” son una respuesta a lo que llamó la “ocupación y su agresión continua contra nuestro pueblo y los lugares sagrados”.
El día del ataque, que Hamás denominó “Operación Diluvio de Al-Aqsa”, el comandante militar del grupo terrorista, Muhammad Deif, dijo en un mensaje grabado que se lanzó en represalia por la “profanación” de la mezquita de Al-Aqsa por parte de Israel y que fue un seguimiento de avisos previos por parte del grupo.
El 7 de octubre, miles de terroristas liderados por Hamás irrumpieron en la frontera de Israel con la Franja de Gaza y arrasaron asesinamente las comunidades del sur de Israel, matando a más de 1.200 personas, en su mayoría civiles. Al menos 240 personas fueron secuestradas como rehenes en Gaza.
Israel ha respondido con una campaña militar destinada a destruir a Hamás, sacarlo del poder y liberar a los rehenes. Al mismo tiempo, Hezbolá ha atacado a lo largo de la frontera norte, alcanzando puestos militares y comunidades y disparando cohetes hacia el norte de Israel. Dice que la acción es para apoyar a Hamás.
Los funcionarios iraníes, entre ellos el presidente Ebrahim Rasi y el ministro de Asuntos Exteriores Hossein Amir-Abdollahian, han prometido venganza por la muerte de Mousavi. Hezbola dijo que considera el asesinato como una “violación flagrante y descarada”, según Press TV, propiedad estatal de Irán.
Las Fuerzas de Defensa de Israel se negaron a comentar sobre el ataque que mató a Mousavi.
Si bien el ejército de Israel, por regla general, no comenta sobre ataques específicos en Siria, ha admitido haber realizado cientos de incursiones contra grupos terroristas respaldados por Irán que intentan afianzarse en el país durante la última década.
Israel ha acusado a Irán de ser una fuerza clave detrás del ataque coordinado de Hamás contra Israel, en el que el grupo terrorista logró atravesar la valla fronteriza de alta tecnología de Gaza para llevar a cabo su devastador ataque a las comunidades cercanas.
El Wall Street Journal informó en octubre que unos 500 miembros de Hamás y del grupo terrorista aliado Jihad Islámica Palestina se entrenaron en Irán antes del ataque a Israel.
Un
ataque aéreo estadounidense mató a Soleimani en Irak en enero de 2020. Teherán respondió al asesinato de Soleimani lanzando una andanada de misiles contra bases estadounidenses en Irak, causando decenas de lesiones por conmoción cerebral, pero ninguna muerte entre los soldados estadounidenses estacionados allí.
Pero los funcionarios iraníes han prometido repetidamente que tomarán medidas adicionales e impondrán sanciones a personas acusadas de participar en la operación de asesinato.
A Soleimani, que dirigió la Fuerza Quds de élite de la Guardia Revolucionaria de Irán, se le atribuye haber ayudado a armar, entrenar y liderar grupos armados en toda la región, incluidas las milicias chiítas en Irak, los combatientes en Siria y Yemen, el grupo terrorista libanés Hezbola y grupos terroristas en Cisjordania y Gaza.
Estados Unidos lo consideró responsable de la muerte de muchos de sus soldados en Irak. Es aclamado como un ícono nacional entre los partidarios de la teocracia iraní.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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