En una ronda de entrevistas, el primer ministro dice que no ve «ninguna lógica» en sentarse con el líder de la Autoridad Palestina, citando la persecución de cargos de crímenes de guerra contra Israel y el pago de estipendios a terroristas.
El primer ministro Naftali Bennett dijo el martes que no ve ninguna razón para reunirse con el líder de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, a pesar de una serie de contactos de alto nivel entre el nuevo gobierno de Israel y la Autoridad Palestina.
Bennett, hablando con la emisora pública Kan como parte de una serie de entrevistas que concedió a los medios de comunicación israelíes, citó la persecución por parte de la Autoridad Palestina de cargos por crímenes de guerra contra Israel en la Corte Penal Internacional (CPI) y el pago continuo de estipendios mensuales a los prisioneros de seguridad, incluidos los condenados por matar israelíes.
«No veo ninguna lógica en encontrarme con alguien que está demandando a soldados de las FDI en La Haya y acusándolos de crímenes de guerra, y al mismo tiempo pagando salarios a terroristas», dijo Bennett a la emisora pública Kan. «No veo la lógica en conocerlo».
En marzo, la fiscal principal de la CPI anunció que estaba abriendo una investigación sobre las acciones cometidas por Israel y los palestinos en Cisjordania, Gaza y Jerusalén Oriental desde el 13 de junio de 2014. Fue la solicitud de Abbas a La Haya la que llevó a la apertura de la sonda.
Bennett dijo a los líderes judíos estadounidenses a principios de este mes que no se reunirá con Abbas, citando la decisión del jefe de la Autoridad Palestina de llevar a Israel ante la CPI.
La llamada oficiosa con líderes de la Conferencia de Presidentes de las principales organizaciones judías estadounidenses se produjo días después de que el ministro de Defensa, Benny Gantz, se reuniera con Abbas en Ramallah, en las primeras conversaciones cara a cara de alto nivel entre funcionarios israelíes y palestinos en más de una década.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, pronuncia un discurso en la sede de la Autoridad Palestina en Ramallah, el 5 de mayo de 2020 (Flash90).
Cuando se le preguntó el martes sobre la importancia de la reunión en términos de la política del nuevo gobierno con respecto a los palestinos, Bennett reiteró su creencia de que no sería posible ningún avance político en el futuro cercano, manteniendo su posición de larga data de que no debería haber un estado palestino.
«Me opongo a un estado palestino; creo que sería un error terrible», dijo. «No voy a hacer eso».
Al mismo tiempo, dijo Bennett, estaba de acuerdo con el enfoque de Gantz de mantener lazos y conexiones con los funcionarios palestinos para mantener la calma y la coordinación de la seguridad.
Pero, agregó, no hay posibilidad actual de reiniciar las conversaciones de paz con los palestinos.
«Todos entendemos que por el momento no es relevante», dijo.
Israel y la Autoridad Palestina históricamente mantienen una cooperación de seguridad en Cisjordania que ambos consideran vital. Sin embargo, los lazos de seguridad se degradaron el año pasado cuando los lazos con los palestinos se agriaron en medio de una serie de movimientos del entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que parecían favorecer la posición israelí. Abbas dijo que los lazos se restablecerían después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, asumiera el cargo en enero.
Bennett concedió entrevistas a las tres principales cadenas de televisión, así como a varios periódicos y sitios de noticias, antes de Yom Kipur.
En declaraciones al sitio de noticias Walla, el primer ministro dijo que sabe que muchos israelíes están enojados con él por su decisión de formar un gobierno con partidos israelíes de izquierda y árabes, pero que apoya la medida.
“Hay bastantes personas entre el público que estaban muy decepcionadas por el hecho de que se creó este gobierno y cómo se creó”, dijo Bennett. «Espero y les pido que vengan con la mente abierta y me juzguen a mí y al gobierno por nuestras acciones».
El recién juramentado gobierno israelí posa para una foto grupal en la residencia del presidente en Jerusalén, el 14 de junio de 2021 (Yonatan Sindel / Flash90).
Bennett, quien rotará en el cargo de primer ministro con el líder de Yesh Atid, Yair Lapid durante el mandato del gobierno, pudo formar una coalición de partidos de izquierda, centrista y de derecha, junto con el islamista Ra’am, en gran parte a través de su objetivo común de expulsar a Benjamin Netanyahu de la oficina del primer ministro.
El nuevo gobierno, que asumió el cargo en junio después de cuatro elecciones nacionales desde abril de 2019, está integrado por ocho de los 13 partidos que obtuvieron escaños en las elecciones del 23 de marzo: Yesh Atid, Blue and White, Yisrael Beytenu, Labor, Yamina, Nueva Esperanza, Meretz y Ra’am.
Netanyahu y sus aliados han criticado regularmente a Bennett por confiar en el apoyo de Ra’am para jurar el gobierno de poder compartido, aunque el Likud hizo sus propios esfuerzos para cortejar al partido islamista después de las elecciones generales de marzo.
Bennett dijo el martes que podría haber dejado pasar la oportunidad de formar un gobierno poco probable que abarque todo el espectro político y, en cambio, ir a una quinta elección, “y sé que mucha gente está enojada, y eso está bien, y yo me apoyo a mi decisión.»
Bennett, hablando con las noticias del Canal 12, se disculpó por «el dolor que le causé» a la familia de Barel Hadaria Shmueli, un oficial de la policía fronteriza que recibió un disparo en la cabeza a quemarropa de un pistolero palestino el 21 de agosto y sucumbió a su heridas poco más de una semana después.
El oficial de la Policía de Fronteras Barel Shmueli, quien resultó gravemente herido en un tiroteo en la frontera de Gaza, el 21 de agosto de 2021. Murió a causa de sus heridas el 30 de agosto (Policía de Fronteras).
Su familia, junto con activistas de derecha y legisladores de la oposición, acusaron al ejército de emitir reglas de enfrentamiento demasiado restrictivas que, según ellos, impedían que las tropas mantuvieran a los alborotadores alejados de la valla fronteriza.
El padre de Shmueli ha sugerido que Bennett debería dimitir por el incidente, su madre ha dicho que no confía en el gobierno ni en el ejército. La familia también ha rechazado la investigación de las Fuerzas de Defensa de Israel, exigiendo una investigación independiente.
«Cometí un error», dijo, refiriéndose a una llamada telefónica que hizo a la familia en la que confundió el nombre de Shmueli con el de su padre. “Pido disculpas a la familia, pero es importante señalar que no fue asesinado, cayó cumpliendo con su deber”.
Las FDI han negado que las regulaciones de fuego abierto fueran las culpables, señalando que el propio Shmueli disparó contra los alborotadores cuando se apresuraron a cruzar la frontera, y dijo que la forma en que se desplegaron las tropas fue la culpa.
En respuesta a la entrevista de Bennett, la madre de Shmueli, Nitza, llamó a Bennett «perro» y «asesino» en las redes sociales, antes de aparentemente borrar la publicación.
“Siéntete avergonzado, pedazo de perro”, escribió en Facebook el martes por la noche.
«¿Cómo te atreves a decir que mi hijo no fue asesinado, eres un asesino con sangre en tus manos … Te prometo, Bennett, que algún día nos encontraremos», Agregó siniestramente.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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