“Es tan triste que los jóvenes no tengan suficiente enseñanza cristiana antes de enfrentarse al mundo”, destaca Fady, reafirmando un problema muy visible cuando conversamos con algunos jóvenes cristianos universitarios. De hecho, buena parte de ellos no tuvieron el aprendizaje teológico necesario para soportar los desafíos de la sociedad.
A poco Fady se fue encantando por el ímpetu de la juventud de querer explorar, sentirse desafiado y saciar sus curiosidades. Cuando menos percibió él ya estaba alejado del evangelio y viviendo un estilo de vida que lo dejaba cada vez más deprimido.
Fady también descubrió cómo los cristianos sufren prejuicios en la sociedad, cuando deciden defender sus principios. Un amigo suyo, estudiante de medicina, dejó de ser asistente del profesor, simplemente porque profesaba los valores cristianos. La universidad fue uno de los ambientes más difíciles para él.
A pesar de eso, fue a través de un grupo de jóvenes también estudiantes que tuvo la oportunidad de volver al primer amor.
“Conforme me acerqué al ministerio de jóvenes, empecé a cambiar. No necesitaba más quedarse solo y luchar solo. “Encontré a las personas que se preocupaban conmigo, oraban por mí y me ayudaron a crecer en mi relación con Dios”, dijo.
Cursando el segundo año de ingeniería, actualmente Fady transformó el campo universitario en una misa de evangelismo. Él pasa en los dormitorios de algunos estudiantes predicando el evangelio y orando por ellos, testimoniando el amor de Dios a través de su vida.
“Mi sueño es vivir el llamado de Dios para mi vida. Yo oro para que aunque la situación a nuestro alrededor sea difícil y ante todos los desafíos que enfrentamos como jóvenes cristianos, sigamos brillando la luz de Cristo, mostrando a la gente el camino para encontrarlo “, concluye el chico, según informaciones de la organización puertas abiertas .
Fuente: Biblia Todo
