Zachary Koehn y Cheyanne Harris, del condado de Lowa en EE.UU, han sido llevados a juicio esta semana por haberle propiciado la muerte a su propio hijo, Sterling, un bebé de 4 meses, que falleció luego de haber pasado semanas encerrado en un cuarto oscuro sin un cambio de pañal y sin haber comido bien.
El padre del menor, Zachary llamó a la policía para reportar el deceso del bebé diciendo “Alrededor de las nueve mi novia fue a chequear al niño, y luego, como a las 11 u 11:30 lo fue a revisar otra vez y el bebé se había ido”.
El testimonio del médico forense que ha llevado el caso expresa que la muerte del niño fue producida porque le negaron los cuidados necesarios de un bebé de su edad. Las fotos tomadas en el lugar del deceso mostraban a Sterling envuelto por varias mantas llenas de orina y ropa con heces que le colocaron al bebé en la silla estilo columpio donde se encontraba cuando lo hallaron muerto.
Lo más impactante es que la tela del pañal que tenía puesto el menor tenía un cúmulo de gusanos, producto de no habérselo cambiado en varias semanas, ya que las larvas se habían hecho gusanos con el paso de los días.
Ante el jurado, el médico aseguró las tres posibles causas del fallecimiento de Sterling: desnutrición, deshidratación y dermatitis severa. “Cada una de estas condiciones habrían sido suficiente individualmente para matar a cualquier bebé” dijo el doctor que no tiene la más mínima duda de que este caso sea un asesinato.
Según los datos aportados por la trabajadora social asignada al caso, el bebé falleció de muerte súbita, también había sido expuesto a drogas como metanfetaminas. Además, sus registros médicos de nacimiento revelaban que al nacer Sterling, encontraron droga en el cordón umbilical del niño mientras estuvo en el hospital.
La pareja no solo tenía al bebé sino también a una niña de 2 años, hija de Zachary. El padre e implicado en el homicidio reveló que “nunca le he cambiado el pañal porque son responsabilidades de Cheyanne, la mía es cuidar de mi hija. Yo le dí de comer a Sterling hace unas semanas” dice.
Los vecinos de la pareja afirman la existencia de la niña, que ha sido llevada a un hogar provisional, por motivos sin esclarecer aún, pero nunca se enteraron de que ellos tenían a un bebé pequeño.
Según las declaraciones de Zachary, el bebé le agarró los dedos y se mostraba despierto, cosa que fue negada por el médico alegando que el menor debía haber estado en un estado letárgico, sin responder a los estímulos que pudieron haberle hecho y que ya no tenía llanto.
Fuente: Biblia Todo
