Una pareja cristiana de Canadá, presentó una demanda contra la Asociación de Hamilton para la Protección de la Infancia ‘(CAS) que ha sustraído a dos hijos adoptados de su casa después de que se negaron a mentirles a las chicas, diciendo que el ‘Conejo de Pascua’ es real , al igual que muchos otros padres hacen esta época del año.
“Hemos decidido no mentir”, dijo Derek Baars, que es el padre adoptivo de dos niñas, al periódico ‘National Post’ cuando les explicó un empleado de la Asociación insistiendo en que él y su esposa Frances Baars tenian que decir a sus dos hijas, de tres y cuatro, que ‘el conejo de Pascua es real’.
“Les explicamos la asociación que no estamos dispuestos a mentir a los niños. Si nos preguntan, no les vamos a mentir pero tampoco no hablariamos de este asunto por nuestra iniciativa”, dijo.
El permiso de adopción Baars, fue dado por miembros de la Iglesia Presbiteriana Reformada de América del Norte, se ha cancelado y los niños fueron sacados de la casa de la pareja. Derek y Frances presentaron una demanda contra la Asociación, patrocinado por el ‘Centro de Justicia para las libertades constitucionales’ – un grupo sin fines de lucro conservadora – la semana pasada.
Dominic Verticchio, director ejecutivo de la Asociación ‘Hamilton’, desafió a la acusación de que la organización estaba faltando el respeto a las creencias de la pareja cristiana. Dominic no dio más explicaciones sobre el caso, aparte de decir que la agencia trabaja para tener las costumbres habituales de los niños en adopcion, mientras que estan en observación.
El empleado de la CAS, que insistió en que el Sr Baars deben enseñar a sus hijas adoptivas que el ‘Conejo de Pascua es real’, El le dijo a la pareja que la figura alegórica era una parte importante de la cultura canadiense.
“Mi marido y yo estábamos confundidos”, dijo Frances. “Le pregunté si el realmente creía en el ‘Conejo de Pascua’ o también pensaba que era una ficción. Entonces quizo eludir esta cuestión en un principio, pero finalmente admitió que el ‘Conejo de Pascua’ no era real, pero no consideró que decir a los niños que es real significa una mentira. ella cree que esto es una parte esencial de la experiencia de todos los niños canadienses “.
En la demanda contra la Asociación, Frances escribió que el empleado de la CAS “hizo declaraciones despectivas y acusaciones contra” su fe cristiana y la de su marido.
“Fue una gran alegira tener a las niñas con nosotros, las amamos desde el momento en que llegaron a nosotros”, dijo Frances.
Fuente: Ante el Peligro de Apartarse de Dios
