Dos tumbas antiguas fueron gravemente dañados después de un ataque en Jerusalén. Los incendios fueron causados el pasado viernes (11). Los investigadores israelíes no saben a quién prendió fuego a la tumba de Absalón (hijo del rey David), en el valle de Kidron, frente al Monte del Templo. Otro grave se llegó a Josafat, el cuarto rey de Judá que gobernó durante 25 años.
Las tumbas se encuentran entre una serie de otras tumbas antiguas en la base del Monte de los Olivos. La tumba de Absalón se identifica tradicionalmente como un monumento a la figura bíblica del mismo nombre, aunque los arqueólogos creen que el sitio es el primer siglo antes de Cristo.
Según el “Times” de Israel, el fuego se inició a las 16:15 el viernes pasado (11) y causó daños considerables en las estructuras de más de 2000 años.
Assaf Avraham, administrador de Israel Park, responsable del parque nacional que rodea las paredes de la ciudad vieja, dijo en un comunicado que el fuego “causó daños a los valores del patrimonio y joyas arqueológicas de gran valor.”
Y agregó: “Vamos a actuar a la medida de nuestras posibilidades, con la aplicación de la ley, incluida la policía, para encontrar a los responsables y llevarlos ante la justicia”, dijo. Un portavoz de la policía se negó a comentar.
El “Times” de Israel informó que otros tres sospechosos de ataques incendiarios dirigidos camiones de aguas residuales municipales, también se llevaron a cabo en Jerusalén, en la noche del viernes. Sin embargo, dijeron que aún había ninguna indicación de que no había ninguna relación entre el fuego y el sospechoso en el ataque a las antiguas tumbas.
Fuente: Ante el Peligro de Apartarse de Dios
